A Oscar, mi vecinito de siete años, lo llevaron a rastras hoy al colegio. Antes, entre lágrimas y berrinches decía:
-No quiero ir. Eso e' to' lo día, to' lo' día, to' lo' día...
PD: ¿Qué hará Oscar cuando tome conciencia de que le tocará vivir la misma pela durante los próximos 11 ó 12 años?
Jaja, que gracioso está eso! Pobrecito.
ResponderEliminarA mi hermanito también mi mamá lo arrastraba y lo subía a la mala en el coche que lo llevaría a la escuela. Ese muchacho pataleaba y lloraba como si lo estuviesen secuestrando.
To lo dia, to lo día, ta buena esa.
Saluditos Yalo
Hola, mi querido B.
ResponderEliminarSe acerca febrero...
Y.
jaja...caramba, me recuerda a mi hermano.
ResponderEliminarAbrazos
Querido Oscar,
ResponderEliminarUn abrazo. Espero, sea un susto licito. Espero que el colegio todo este bien. Espero que sean solo tus berrinches y que nadie te toque. Porque entonces, me atrevería a matar.
No creo en la paz a toda costa, pero si, me atrevería a matar.
Chao oscar, te quiero.
Siempre te veo en todas las caras de los niños bellos de mi isla.