4/10/12

Yo te conozco, sé lo que piensas (10)

Para ti mi cuerpo es un hotel. Y yo qué vergüenza quiero que lo sea. Regresa. Atraviesa el océano. Prometo dejar en la entrada tanto miedo, tanto recato, tanta prudencia, tanto decoro. La puerta del cuarto estará abierta. Llega de noche, tus mejores horas. ¿Ves la luz filtrarse por la puerta? Es el resplandor de mi piel, que celebra por adelantado el encuentro.
(…)
(…)
(…)
No. Quédate. Mejor no regreses. Olvidé que en mis huesos, en mi mente y en mis entrañas, cuando se trata de ti, todavía es temporada baja.